Como sabras, vivimos en un mundo de dualidades: arriba y abajo, luz y oscuridad, caliente y frío, derecha e izquierda. Estos son algunos de los ejemplos de los miles de polos opuestos que existen. Para que exista un polo debe existir también el otro. ¿Es posible que haya una derecha sin una izquierda? Ni por casualidad.
Lo diferente nos une, por eso amamos lo que hacemos y brindamos por ello. Con zumo de uva para evitar la resaca, preferimos a que las cosa salga bien. Somos eléctricos por naturaleza y por eso conectamos.